Hace unos días que queríamos hacer mención a un hecho que nos ha abierto los ojos sobre un asunto en torno al que existen muchas falsas ideas. El whisky escocés es bueno si es bueno; hay ejemplos muy significativos. Pero el whisky escocés también puede ser muy malo.
Aun así, nosotros hemos ido dando buena cuenta (aunque a pequeños tragos) de la botellita de Jacobite (que rima con Scoth Brite) que compramos en Ely. Os vais a tener que creer que era malo, porque no ha quedado ni una gota.
Y justo ahora, que en la nevera del hotel hay una cubitera con hielo…